No es posible dar respuestas absolutas,
universales, en ecología aplicada. Todas deben matizarse, pues dependen de las condiciones
locales, que varían de sitio en sitio y de año en año. Para desgracia de
nuestro cerebro dicotómico, amante de la seguridad de poder identificar en
absoluto a buenos y malos, en lugar de en relativo a mejores y peores, la realidad se mueve en una amplia escala de
grises.
Tratamos con sistemas naturales
complejos, en los que juegan su papel distintos fenómenos: deterministas
(evolución...